- Sep 23, 2018
- Aldair Teutle
- Uncategorized
- 0 Comments
Una de las prioridades que en toda edificación debe existir, es la seguridad. Los accidentes son una realidad latente, y en esta ocasión hablamos de los incendios. La resistencia al fuego de los materiales de construcción, juega un papel preponderante que debe considerarse, ya que puede marcar la diferencia en una catástrofe.
Del tema se desprenden varios aspectos que se deben analizar. Partamos del significado de resistencia. Evidentemente, la palabra cuenta con diversas acepciones, pero en lo que respecta al tema, se refiere a lo siguiente:
La resistencia al fuego se define como la disposición de un elemento de construcción para mantener su estabilidad mecánica. Quiere decir que no propaga la llama, además de poseer un aislante térmico. Dicha disposición tiene cierto periodo de tiempo.
A su vez, la protección contra incendios se divide en dos: activa y pasiva. La primera tiene que ver con la implementación de sistemas y dispositivos de seguridad que combaten al fuego en caso de presentarse. Éstos detectan humo y temperaturas elevadas, y se activan rociando agua, espumas o agentes extintores.
La pasiva se refiere concretamente a los materiales y elementos de construcción, que deben estar encaminados a resistir y aislar la estructura de un edificio de los efectos del fuego.
Clasificación de incendios
Existen diferentes tipos de incendios que podemos identificar, pero en general, todos se presentan por un principio básico el cual explicamos a continuación.
La forma más sencilla de comprender el surgimiento de un incendio es por medio de un triángulo. Consiste en identificar los componentes del fuego, que al interactuar entre ellos lo van a producir. Estos son calor, combustible y oxígeno.
El calor es el desencadenante de una combustión, así como el responsable de mantenerla. El combustible es aquel material que puede arder. El oxígeno es esencial para que se activen los procesos químicos del fuego.
Por material de origen
Una vez dicho lo anterior, distinguimos cinco clases de fuego, que se agrupan en función del material donde proviene. Según su clase, deben de emplearse diferentes compuestos para extinguirlos.
- Clase A: Sólidos.
- Clase B: Líquidos.
- Clase C: Gases.
- Clase D: Metales.
Por el lugar
Ahora bien, los incendios pueden presentarse en diferentes espacios. En el urbano, lo más usual es encontrarlos en casas y edificios.
Otro sitio común es en el industrial, fábricas y complejos manufactureros, que por sus características, a veces el incendio suele ser difícil de controlar.
Finalmente, tenemos a los incendios forestales, que engloban todos los espacios naturales.
Por la magnitud
Hablamos de magnitud de acuerdo a la longitud que abarca el incendio. Ejemplo de ello es cuando solo se menciona un conato, que abarca de uno a tres metros.
Enseguida tenemos al parcial, que como lo dice el nombre, no consume todo el espacio o las instalaciones en el que se produjo.
Siguiendo con la escala, el último por mencionar es el total, que resulta ser el más severo.
Los materiales de construcción son fundamentales
En México por ley, los materiales utilizados en construcciones deben ser resistentes al fuego. De la amplia gama existente para este fin, hay algunos que sobresalen por soportar mejor los embates del fuego.
La mayoría de las construcciones usa materiales pétreos (piedra). En cuanto a metales, el acero es uno de los más empleados, y lo encontramos en la estructura de una edificación.
La resistencia al fuego del acero comienza a sucumbir a partir de los 300 grados celsius. Al ser un metal conductor de temperatura, propicia que su resistencia disminuya más rápido.
Debido a lo anterior, lo recomendable es proteger la estructura y aumentar su resistencia. Y para ello, se puede recurrir a rodearla con hormigón de un espesor de acuerdo a las necesidades.
Otra alternativa, aunque más compleja, consiste en extender la estructura que soporta la edificación, al exterior de la misma, con el objetivo de aumentar su capacidad.
Finalmente, otra de las opciones para protegernos de los incendios es el multipanel. Es uno de los materiales más resistentes, ya que en su composición se utilizan retardantes químicos y compuestos incombustibles.
Recordemos que los materiales de una construcción hacen la diferencia. Tomar en cuenta la resistencia al fuego es vital, significa preservación de vidas.